El match se inicio con acciones lentas, haciéndose visibles algunas fallas en ambos equipos. En Independiente los delanteros se desempeñaban con acierto, mientras que la defensa actuaba con cierta inseguridad. En Gimnasia se planteaba el caso inverso; los defensores, y en especial Montañez -que salvo innumerables situaciones de apremio- constituían un escollo difícil de para los Rojos, pero la linea de ataque resultaba inhábil para sacar provecho frente a la valla rival. Dentro de estas características, Independiente fue dominando la situación y paralelamente aumentando ventajas.
Después del tercer tanto los jugadores de Independiente quisieron "gozar" a sus contrarios, y estos, ante la imposibilidad de evitarlo por medios mejores, recurrieron a las intervenciones vehementes, destacándose en este sentido Tombel.
El juez no supo imponer su autoridad a tiempo, y cuando quiso hacerlo no encontró la necesaria colaboración de los jugadores. De esta forma el espectáculo perdió su carácter futbolístico al desorganizarse la alineación de los equipos, y se transformó en un vulgar partido callejero.
INCIDENTE
A partir del tercer tanto, los delanteros de Independiente realizan jugadas individuales y colectivas que burlan por completo a sus rivales. Estos reaccionan respondiendo con algunas brusquedades. Cuando transcurren 17 minutos E. Cerioni engancha a Erico, que al perder el equilibrio atropella a Martínez. Se origina un incidente en el que toman participación otros jugadores. Como resultado, Montañez y Erico deben abandonar el campo por indicación del referee. Toma Zorrilla el tiro libre con que se castiga el foul cometido por Cerioni, enviando la pelota sobre el arco. Cabecea De la Mata. La Pelota pega en el travesaño y luego al rebotar en el suelo traspone la línea. A continuación se juega en forma desorganizada, perdiendo la lucha todo su interés.
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